Hola queridas literaut@s, ¿sabéis de qué película es esta enternecedora declaración de amor?
Sí, es LOVE ACTUALLY, una de mis películas favoritas.(Si existiera el libro sería mejor, pero me conformo). PELÍCULAS, así en mayúsculas, tengo unas cuantas. Y, claro, si ya me conocéis un poco, sabréis que todas son románticas, sí o sí.
¿Que nos pasa a las mujeres con las pelis románticas? Yo creo que ya nos viene desde el Cinexín de disney, plagado de príncipes, castillos, zapatitos de cristal...Y claro, ahora, el Señor Grey es la bestia, que en el original era feo pero también millonario, y nosotras la Cenicienta con unos manolos en los pies, como Carrie Bradshaw en Sexo en Nueva York. Ya desde la infancia estamos predeterminadas para que las películas de romances eternos nos hagan suspirar, gritar, reír, llorar y mirar embobadas la pantalla una y otra vez, una y otra vez, y otra, y otra... Y es que puede gustarme mucho, e incluso impresionarme, una película como Gladiator, que me encanta. Pero la única razón por la que la he visto más de una vez y de dos, es porque es la PELÍCULA de mi marido, y no me queda otra. Sin embargo, si es de género romántico, y encima buena (que malas también hay unas cuantas), puedo llegar a ver la misma película decenas de veces sin cansarme. En concreto Love actually, puede que la haya visto quince o veinte veces, y sólo con buscar la escena en el youtube, ya tenía ganas de verla de nuevo.
Estamos un poco enfermas ¿eh? Que ganas de torturarnos con lo que no tenemos. Y es que, al menos yo todavía no he abierto la puerta y me he encontrado con el mejor amigo de mi marido que está rebueno, e inexplicablemente sin pareja, para declararse cual príncipe azul con unos cartelitos monísimos propios de un artista, para que mi marido repantigado en el sofá, no se entere de la película. A ver...esas cosas no pasan. Como mucho te hace ojitos el del gas o el cartero, que el mío no siempre llama dos veces, con una ya se conforma.
Total, que te pones a analizarlo y te deprimes soberanamente. Porque son pocas las que han pescado al uno entre un millón que es calcado al protagonista de la película de turno.
Pero no pasa nada...vamos con la pescadilla que se muerde la cola...Como me estoy deprimiendo, viendo lo que tengo al lado, que no sabe ni que regalo comprarme para mi cumpleaños, voy a recurrir al plan B: ponerme una película super-romántica. Y para momentos especialmente de bajón, recurro al plan C: maratón de Saga Crepúsculo. Y como no tengo el cuerpo para luchas vampíricas, usaré la tecnología a mi favor, y me voy a saltar a vampiros, lobos y demás, para recorrer todas las escenas de amor de las cuatro películas. ¿No me diréis que no es una solución eficaz para el bajón? ¡Menudo subidón! aunque igual alguna diría que es más una sobredosis de romance, y que prefiere darse un atracón de chocolate. Pero mira, si me tienen que subir los niveles, más vale que sean los de la libido, en vez de los del azucar. Bueno, os dejo que estoy solita en casa, con todo el sofá para mí, y dispuesta a darme un atracón de amor...en mi pantalla plana.
Os dejo el vídeo de Christina Perri de Amanecer Parte 2, para que vayáis haciendo boca...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Y tú que opinas literaut@?